Relatos

Eterno femenino

Share

Esta mujer me tiene trastornado,
sumido en la pasión, sorbido el seso,
mas me siento feliz con todo eso
pues hállome por Eros convocado.

Cuando su mano ciñe mi costado,
encuentro la razón del embeleso
y si su boca me regala un beso,
puedo ver, de la Luna, el otro lado.

El cimbreo que imprimen sus caderas
es huracán de estrellas, torbellino,
causa de atascos en las carreteras.

Es un volcán de seda que examino,
con todos los sentidos y maneras,
en la incansable busca del camino.

 

(Jeco Monteriegos)

Soneto escrito a cuatro manos por Jesus Mazariegos y Francisco Montesinos

{jumi [*7]}