María Sontz se le diagnosticó a la edad de 40 años, pero sus síntomas se iniciaron en sus treinta. Ella vio un número de médicos y tomó medicinas para diferentes problemas a los que se había pensado.
Después de cinco años, que finalmente se produjo un neurólogo que le diagnosticó la enfermedad de Parkinson.
Los médicos dicen que es difícil de diagnosticar a alguien tan jóvenes por muchas razones. Por un lado, los síntomas pueden estar relacionados con el uso de drogas o simples dolores y molestias. Otra, la mayoría de los médicos no están buscando a alguien que bajo la edad de 60 años.